sábado, 31 de julio de 2010

Ese disco

Señor, venimos hoy a repetirte
ese disco tan viejo y tan rayado:
"Perdonanos, Señor, ya nunca más
queremos alejarnos de tu lado".

Señor, haz que esta vez sea de veras;
afirma con tu gracia nuestros pasos;
aclara con tu luz nuestros senderos;
alivia con tu amor nuestro cansancio.

Ayúdanos a comprender por qué
tantas veces caímos derrotados;
creíamos ser dueños y señores,
y al hermano caido despreciabamos.

Ayúdanos a comprender que tú
sólo tú, das el triunfo asegurado:
el triunfo que tu Hijo mereció
subiendo paso a paso hasta el calvario.

Gloria a ti Padre bueno, que mandaste
a tu hijo, que juntara tu rebaño.
Gloria contigo a El y al Santo Espiritu,
que es el mismo perdón de los pecados.

Autor desconocido

Amar

Ama quien se entrega a sus hermanos,
ama quien trabaja por la paz;
el amor requiere sacrificios,
pero da una gran felicidad.

Ama el padre que cuida a su hijo,
ama el niño en una ilusión;
no busquemos comprarlo con nada,
el amor nace del corazón.

Amó Dios al entregar a su hijo,
para el hombre poderlo salvar;
ama el hombre que entrega su vida,
para que otros aprendan a amar.

Ama el sol al entibiar la tierra,
ama el rio en su suve cantar;
las estrellas que tenues parpadean
nos enseñan como hemos de amar.

Ama quien no se siente orgulloso,
ama quien no tiene vanidad;
el amor requiere desprenderse
de egosimo y de felicidad.

Examina pues, a ver si tu amas
con amor sincero y de verdad,
busca siempre esta meta en tu vida:
a todos y en todo más amar.


Anónimo

Pidiendo la fe

Dame Señor, la fe que no razona
y que en todo te ve.
Esclarece los ojos de mi alma,
dame vida de fe.
Yo no entiendo el por qué de muchas cosas,
pero confio en ti.
Cuando tú lo permites o dispones,
me convendrán así.
Que eres el más amante de los padres,
no lo puedo dudar;
por eso aunque me aflija o me apenes,
te quiero siempre amar.
Quiero a tu voluntad vivir unido,
prescindiendo de mí;
y en todo los sucesos de mi vida
verte tan sólo a ti.
Y ciegos ya los ojos al sentido,
que ni entiende ni ve,
elevar mis miradas hasta el cielo
por la vida de fe.

Vivir la fe, vivir de la fe, vivir por la fe, vivir según la fe

Autor desconocido

miércoles, 21 de julio de 2010

Accion de gracias

Levanto al cielo la frente, agradecido
por esa luz de los ojos, permanente;
¿Cómo dejar de ser reconocido
por ese brillo, al Dios santo y clemente?

Por admirar las árboles y las flores,
la sonrisa sincera de la infancia,
la naturaleza alegre con sus colores,
el mar revuelto, el barco que balancea.

Agradecido soy por la audición:
oigo el cantar de final melodias;
y escucho el trinarm suave de la canción
que me transporta al cielo de las alegrías.

También por mi voz,
quiero expresar
la más profunda y tierna gratitud,
ouedo cantar, hablar y revelar
el más vibrante ardor del corazón.

Por estas piernas fuertes que transportan
todo mi cuerpo a lo largo del camino;
por estos brazos y manos que me confortan.
Yo te agradezco oh Padre, tanto cariño

Torres Dourado

jueves, 4 de marzo de 2010

Jesús Salvador

La vida suele darnos cachetazos
Hasta hacernos sangrar el corazón
Pero nunca jamás nos olvidemos
Que Jesús nos proteje con su amor
El está en todos los momentos,
Nunca lo olvides, te lo pido por favor
El es paz, es amor, El es justicia
El es para el mundo, salvador
El, que fue un santo, murió crucificado
Para salvar al mundo del dolor
El fue por su Padre enviado
El es el Bendito Hijo del Señor
¿Qué nos espera a nosotros, pecadores
Si el hijo de Dios murió en la cruz?
Debemos aceptar nuestros dolores
Pues El nos ilumina con su luz
Con su luz que es luz para el mundo,
Un mundo lleno de odio y destrucción
Que olvida que Dios está presente
Y que no nos pide nada más que amor
AMOR, sí amor con mayúscula
Un amor que no conoce condición
Un amor que demostró con su muerte
Y fortaleció en su resurrección.

Vicenta Aguero

Esperanza

Por muchas cosas que nos pase

Hay un ángel tutelar que nos ampara

Que hace que siempre con dignidad llevemos

Los reveces que el destino nos depara

Siempre habrá una luz que nos ilumine

No importa si pequeña, quizá casi invisible

Con su minúsculo rayo de esperanzas

Hará que nuevos sueños e ilusiones sean posibles

Ese tremendo dolor que agobia el alma

Por un brevísimo espacio de tiempo irá pasando

Arriba hijo, hermano, amigo, esposo, novio, amante que la vida sigue

¡No te rindas, por Dios, sigue luchando!

Porque no todo es dolor y tristeza en este valle

Al cual nos empujaron que vivamos

La vida cada día recomienza

En un hijo, un amigo, un hermano.

En una flor, en el aire, en el agua,

En el ave que canta en una rama,

En el despertar de la ciudad dormida

Que en mil voces distintas se derrama

Y en los miles de otras cosas pequeñitas

Que imposibles sería enumerarlas

Así es la vida, el mundo, así el destino

De este mágico carrusel interminable

¿El tiempo? ¿El mañana? ¿Quién lo sabe?


Vicenta Aguero