Seguir a Jesús

Seguir es Jesús va más alla de ir a misa, rezar todos los dias y leer la Palabra de Dios. Seguir a Jesús implica un mayor compromiso: estar atentos a lo que El nos pide y cumplir con su Palabra.

Hoy en dia muchos tienen una idea equivocado de lo que implica ser un verdadero cristiano. Se piensa que es simplemente ir a la iglesia y tratar de no hacer mal a nadie. Sin embargo, no es solamente eso sino que eso es sólo una parte. No todo el que dice "Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos" sino que aquel que "escucha la Palabra de Dios y la pone en práctica".
Seguir a Cristo es convertirse en un verdadero discipulo suyo. Este es aquel que escucha a Jesús y trata de poner en práctica sus enseñanzas pero también quiere que este mensaje que él recibió una vez llegue a todo el mundo. Un discipulo y amigo de Jesús es tambien un misionero porque busca que otros también escuchen el mensaje.
Nadie da lo que no tiene por eso el verdadero discipulo de Jesús y apostol de su Evangelio tiene un trato personal con Cristo en la oración frecuente, en la comunión, en la confesión y en la escucha atenta de la Palabra de Dios.
Sólo aquel que ha tenido un profundo encuentro con Cristo se ha convertido en un verdadero seguidor de su doctrina.
Seguir a Jesús implica tener un encuentro personal con él y buscar que otros también se encuentren con él, lo conozcan y lo amen. Por esto, no basta sólo con ir a misa y rezar sino que también hay que evangelizar con nuestras palabras y nuestras obras pues sólo con nuestro testimonio de vida podemos demostrar que somos verdaderos cristianos y que vale la pena ser amigo de Jesús.
Puesto que reconocerán que somos discipulos de Jesús por el amor que tengamos los unos por los otros y no por las actividades pastorales en las que participemos o no. Además la fe se conocer por las obras, una fe sin obras está muerta.
Pidamos a Jesús que nos conceda la gracia de ser verdaderos discipulos suyos y poder seguir sus huellas para que con nuestro ejemplo otros se animen a seguirlo sin importar el qué dirán.