lunes, 8 de febrero de 2010

Tuya mi, Dios

Anhelo pertenecerte
ser tu esposa, Jesús
amarte inmensamente
y servirte, mi Dios

Estar siempre a tu lado
llevar tu amor por doquier
interceder por todos
para que puedan estar bien

Mi alegría es seguirte
siendo por siempre fiel
en la alegría y en la tristeza
contigo permanecer.

No hay comentarios: